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¿A menudo te sientes abrumado por situaciones o relaciones que das por hecho que debes vivir y aguantar, a pesar de no estar cómodo ni de acuerdo con ellas, porque recibiste de tu entorno, desde siempre, mandatos como: «Debes resignarte a que la vida es dura para todos», «Tienes que hacerte fuerte pasando por las peores pruebas», «Es tu deber, como buen ser humano, complacer a los demás antes que a ti», ¿etc.…? Si es así, es tiempo de aprender a poner un freno a todas esas voces externas y también a aquellos pensamientos que están en tu mente pero que en realidad no son parte de tu esencia, sino que fueron, a través del tiempo, fijándose en tu subconsciente sin que te dieras cuenta.

 

Existen muchísimas ideas erradas que pudiste haber adquirido desde tu concepción hasta hoy, a través de tus padres y de tu entorno en general, que no hicieron ni hacen más que llevarte a que no seas consciente de que tu derecho por ley de nacimiento es disfrutar, elegir día a día experimentar lo que te hace bien con total libertad y respeto por ti mismo, de decir No cuando no quieres algo, en vez de dudar todo el tiempo por si acaso molestas a alguien o por si los demás piensan que estás yendo por mal camino o no los conformas ante lo que esperan de ti.

 

Cuando vas dejando de lado a tu esencia, escondiendo tu voz detrás de prejuicios sobre ti mismo y sobre tu realidad, estás condenándote a nunca vivir verdaderas en plenitud y felicidad.

 

Tu familia, amigos, pareja; tu trabajo y cualquier otra persona y actividad que no estén alienadas con tu alma no podrán darte paz ni alegría; por el contrario, te traerán incertidumbre y sensación de no pertenecer, miedo… No son ellos el problema, eres tú que al estar desconectado de ti mismo atraes a tu vida, y permites que se quede, lo que no es para ti y que no te llena, sino que te desgasta y aleja de lo que deseas, cada vez más.

 

Tu deber no es encajar sino encontrar donde y con quienes fluir y sentirte parte sin tener que esforzarte por ello. Por ejemplo, si tu pareja te dice todo el tiempo que tienes que ser de tal o cual forma para ser amado por ella, y eso que te exige está alejado de quién eres y de a dónde quieres llegar realmente, no es responsabilidad suya sino tuya saber poner un límite en esa relación y decidir lo que sea para tu mayor bien, entendiendo que ese no es el amor sano que mereces. No viniste a complacer a nadie, y eres un ser perfecto, valioso y completo tal y como eres. Si alguien te ama busca ayudarte a alcanzar tu mejor versión, claro que sí, siempre habrá algo en lo que puedas y sea bueno para ti evolucionar y es bueno que los otros, como espejos, te lo reflejen, pero eso no es igual a tener que convertirte en la versión de quien él o ella quieren que seas por su propia conveniencia y sin respetar tu ser.

 

Para manifestar y vivir por fin toda la abundancia, la paz y alegría que es para ti y que el Universo tiene para ofrecerte es necesario que aprendas a estar en consonancia con tus deseos, con lo que hace elevar tu vibración y tu confianza de soñar sin temor y sin límites, e ir por ello que quieres ya sin dar lugar a voces extrañas que nada tienen que ver contigo.

 

Escuchar tu voz interna, tu intuición y descubrir lo que tu alma tiene para expresarte es la única clave para lograr estar dónde quieres y para ser quien viniste a ser, y evolucionar hacia la abundancia en todas las áreas de tu vida. La meditación consciente es una gran herramienta para esto, que debes convertir en hábito, sobre todo cuando recién despiertas, antes de realizar cualquier otra actividad; de esta forma puedes asegurarte de seguir el resto de tu día en dirección a donde tu guía interna te envía, sin esa permeabilidad a la opinión ajena y también sabiendo cuáles son aquellos programas mentales que están cargados en tu subconsciente y que tienes que ir transformando para que tu accionar sea el de alguien que se ama incondicionalmente, que se elige antes que a nadie y se siente libre de ser quien es, ya sin limitaciones. Es entrar en ti, saber lo que tu yo superior quiere decirte, en silencio, en calma, darte ese espacio contigo, donde lo único que importa es tu voz, nada más. Para luego usar esa voz y alzarla en todas partes.

 

Ingresar a lo más profundo de tu subconsciente, aceptar las sombras que encuentres allí, hacerlo consciente y sanar lo que tengas que sanar, no es fruto de un proceso sencillo ni superficial, ni se hace por arte de magia, pero es realmente posible y vas a lograrlo aún antes de lo que esperas, si tomas la decisión absoluta de trabajar como nunca antes en ti, y de crecer y ya no dejarte en último lugar, indiferente a tu propia esencia y perdiéndote en medio del ruido del afuera.

 

Si quieres dar por fin ese paso, revisa las opciones que tengo como mi programa: “Consciencia de Abundancia y Felicidad”

Con amor,

Sofía