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FAMILIA, FUENTE DE CONTRASTE

Socialmente y culturalmente nos han enseñado que la familia lo es todo, es lo más importante que debemos cuidar, mantener, proteger, conservar, etc. Y en realidad lo es, es el núcleo en donde inicia nuestra vida aquí en la tierra, de nuestra familia depende nuestro sano desarrollo tanto físico, como mental y emocional y la adecuada inserción en la vida adulta en la sociedad.

Sin embargo, hay algo de lo que no se habla mucho en cuanto a la familia, ya que al ser lo más importante, según nos han dicho, nos negamos a ver el lado obscuro de esta… y nos paralizamos a la hora de tomar decisiones personales que puedan romper ese concepto. Es justo esta parte la que voy a tratar de expandir en este artículo.

Por la familia se callan abusos, por la familia se toleran maltratos, por la familia se convive con una pareja que no amas, se aguantan cosas que no deben aguantarse, por la familia se abandona la autenticidad y la individualidad. Por la familia renuncias a tu propósito personal, por la familia abandonas tus sueños.

Todo esto es bien visto en la familia, aunque sea completamente disfuncional, se aplaude el sacrificio y el sufrimiento en pro de los demás, se justifican los medios por un fin “positivo” que a la larga no resulta así.

Sin embargo, basada en mi experiencia profesional personal y en múltiples investigaciones de colegas, terapeutas, científicos, maestros espirituales, etc. la familia es la mayor fuente de contraste para un nuevo ser humano.

El contraste es todo aquello que no te gusta, son los problemas, los traumas, las heridas, lo que no se siente bien y no quisieras volver a experimentar. Normalmente, estos contrastes, cuando no estás consciente de lo que son, se guardan en el subconsciente y se transforman en tu “sombra” de la cual no se habla y se reprime en lo profundo, la sombra no se vuelve a ver con la idea de que así un día desaparecerá. La triste noticia es que la sombra es parte de ti, no se va con el tiempo y la negación, no es algo de lo que puedes escapar.

“La Familia es la mayor fuente de contraste” es el título de este post y la razón es porque apenas naces, la relación que se genera con tus padres y la relación que tienen entre ellos es tu primer aprendizaje de lo que es el amor aquí en la tierra y de quien eres tú. Tu infancia, así hayas tenido padres muy conscientes, estuvo llena de contrastes, ¿pues a quien no le llenaron de creencias limitantes y miedos? ¿A quién no le castigaron injustamente? ¿A quién no le permitieron ser el mismo? ¿A quien no le abandonaron así sea por momentos, a quien no le paso algo en la infancia que marcó su vida para siempre? Muchos contrastes pasan absolutamente desapercibidos, son minimizados por el adulto que hoy eres, eso si tienes algún acceso a esos recuerdos. Seguramente alguna persona respondió las preguntas que hice arriba diciendo: “tuve una infancia maravillosa, mis padres no se llevaban bien, pero siguen juntos por nosotros” “me pegaban, pero eso no me traumó” “tuve un padre muy estricto, pero lo agradezco” etc. no eres consciente de lo que tu niño vivió en esos momentos porque te desconectaste de esas emociones para no sufrir y ahora no puedes acceder a ese dolor, el dolor que ahora está creando tu vida desde el inconsciente. “Atraes lo que eres y eso incluye a tu sombra”

Debo aclarar que esto no significa que las familias sean un problema, debes comprender para qué es el contraste y para qué elegiste a esa familia en particular para nacer y no en otra. El contraste es necesario para evolucionar en este mundo dual, eso que no se siente bien te ayuda a tener claridad de lo que quieres, te ayuda a avanzar en la dirección que tu alma necesita. La familia al ser la principal fuente de contraste es también tu mayor fuente de evolución consciente y esto puede ser un proceso no tan bonito ni tan aceptado por la sociedad.

Lo voy a explicar con un ejemplo para que se entienda mejor:
Naciste en una familia en donde el padre abandona a la madre, tu madre hace lo mejor que puede para criarte y eso significa que te debe dejar sola en casa durante algunas horas al día. Tú tienes solo 4 años y debes ser un adultito que se maneja solo, las emociones que siente esa niña son de abandono, miedo, soledad, desesperanza, las cuales al no poder ser procesadas por la niña son reprimidas para sobrevivir y no sufrir tanto.

Esta niña fragmenta su personalidad y actúa como un adulto responsable y así se maneja a lo largo de su vida, pero a la vez niega esa parte de ella que es vulnerable, tierna, que necesita ayuda, que necesita ser amada. Esta persona podría tener problemas de pareja buscando personas para cuidar, no permitiéndose ser vulnerable, no permitiendo el amor y cuidado en su vida. Cargando en sus relaciones con responsabilidades que no le corresponden.

Mientras esta niña ya adulta no conecte con el contraste que está guardado en su sombra, no podrá resolver sus problemas actuales en la vida, “solo puedes sanar lo que entiendes y lo que sientes”

Tus padres te amaron a su manera y desde su nivel de consciencia, hicieron lo mejor que pudieron con lo que tuvieron. Nada pudo ser diferente ni mejor de lo que fue. Es exactamente lo que necesitabas experimentar para evolucionar. Sin embargo, si no haces nada con esa historia dolorosa de tu pasado o no traes al consciente aquellos contrastes que marcaron tu personalidad, te mantendrás siendo víctima de tu pasado, le otorgaras el poder a otros de definir quien eres y lo que vales.

Tu familia define tu autoestima o amor propio, una persona que no tuvo cercanía emocional de sus padres, que no fue protegida, que no se sintió amada e importante, difícilmente sabrá como amarse a sí mismo y por ende atraerá a personas que no sepan amarlo por quien es.
En las familias ocurren incestos, violaciones, robos, estafas, maltrato, violencia, manipulación, infidelidades, bullying, vicios, abandono, negligencias de todo tipo, apariencias e hipocresías. Pero como la familia es lo más importante, te enseñan a callar lo que se debe hablar, a negar lo que es evidente, a conformarte, a creer que debes ser igual a tu clan, a sufrir por complacer a los demás, a seguir caminos que tu alma no quiere.
Y así se perpetúan vibraciones bajas que atraen más de lo mismo a las futuras generaciones. Serás visto como oveja negra por hablar, por poner límites, por no complacer, por no seguirles la corriente en cosas que no se alinean con tu verdad y con quien realmente eres. Quizás te alejes, quizás se alejen, pero eso siempre estará bien si es para tu mayor bien y para iluminar las sombras que tienen al mundo en decadencia.
La solución no está en cambiar a las familias, el foco debe estar en el trabajo personal individual, en esa sanación profunda desde la cual liberas a las siguientes generaciones y te liberas tu mismo de perpetuar lo que no funciona y hace daño.
Debes aprovechar el contraste para avanzar al siguiente nivel en todas las áreas de tu vida, no viniste para estancarte en el pasado o a tolerar un presente que no te gusta.
Empieza a hacerte mejores preguntas cuando un contraste llegue a tu vida y busca la raíz real que debes atender, seguramente esta en tus inicios en la vida. En realidad no hay nada que arreglar más bien hay mucho que ver y sentir para trascenderlo…
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